
La estación de las flores, el amor y la juventud siempre fue bien recibida en Alta Gracia.
De la Orquesta Maipo a Quinto Destino, la música corriendo por la sangre.
Cosas Nuestras08 de marzo de 2021Nuestra amiga y lectora Rosana Oliva nos envió una serie de fotos que además, resumen una hermosa historia familiar dedicada a la música.
Se trata de contar un poco la historia de la ORQUESTA MAIPO. Rosana nos cuenta que "el primero de la izquierda fue mi abuelo Nicolás Oliva, que tocaba el bandoneón. El de la derecha era Juan Oviedo, violinista y el del medio Eduardo Oviedo, guitarrista".
La historia de la ORQUESTA MAIPO se remonta a la década del 30 y hasta mediados de los años cuarenta. Eran de Alta Gracia y deleitaban a todos tocando tango, fox trot y pasodoble en las reuniones bailables de aquellos tiempos.
"Eran de Alta Gracia. Mi abuelo Nicolás Oliva. Juan y Eduardo eran hermanos de mi abuela Rosario Oviedo". Pero el hilo musical de la historia, no se queda en ellos.
"Hoy -cuenta Rosana- mi hermano es músico, se llama Walter Oliva".
Walter heredó su pasión por la música de su abuelo, evidentemente. Por eso, a los 15 años tocó en el Conservatorio de música de Buenos Aires, como tecladista y más tarde integró el grupo "Sol Naciente", que luego fue "Quinto Destino".
La estación de las flores, el amor y la juventud siempre fue bien recibida en Alta Gracia.
El apellido Zorn vincula a Victoria directamente con Villa Oviedo. Barrio con identidad si los hay, en Alta Gracia. Y mucho de eso tiene que ver con sus orígenes laburantes que lo forjó en una barriada que a fuerza de manos callosas fue erigiéndose al sur de la ciudad.
Contarles a quienes no lo conocieron, quién fue Hugo Barrera es entrar en un territorio casi mágico, surrealista al menos.
Nota en homenaje al querido "Chochó" Gómez, que hace unos días habría cumplido años. Una comparsa que hizo historia en Alta Gracia.
La fecha exacta quedó en el baúl de los recuerdos de una ciudad que suele perder la memoria de vez en cuando, y que necesita de unas ayuditas para recuperarla. ¡Y en eso estamos!
Oscar Ferreyra Barcia es uno de los grandes historiadores que ha tenido Alta Gracia. De su escrito “Volviendo al Pasado”, rescatamos este texto hablando de personajes de principios del Siglo XX.
Hace más de 50 años, Alta Gracia tuvo entre sus empresas locales, una que marcó la infancia de varias generaciones. Las “gallinitas” Pio Pio fueron marca registrada en el paladar de muchos, y un auténtico ícono de emprendimiento altagraciense.
Hubo en nuestra ciudad clubes emblemáticos por historia, por logros, y también porque su presencia lejos dejó de pasar desapercibida. Fue el caso del Club Ferroviarios. “El Cerro”, para los amigos.
El apellido Zorn vincula a Victoria directamente con Villa Oviedo. Barrio con identidad si los hay, en Alta Gracia. Y mucho de eso tiene que ver con sus orígenes laburantes que lo forjó en una barriada que a fuerza de manos callosas fue erigiéndose al sur de la ciudad.
La estación de las flores, el amor y la juventud siempre fue bien recibida en Alta Gracia.
Cecilio Luna fue, para todos, el Negro Jololo. De físico imponente que poco tenía que ver con su caracter, era imposible no quererlo. Conozcamos un poco más quién fue este personaje...