
El sacerdote salesiano cuyo fallecimiento sigue siendo una incógnita para la ciencia y la Iglesia.
Pocos conocen esta historia que cuenta el Dr. Jorge Mazzucco en su libro “Alta Gracia Olvidada”.
Curiosidades18 de enero de 2025Pocos conocen esta historia que cuenta el Dr. Jorge Mazzucco en su libro “Alta Gracia Olvidada”.
En la ciudad hubo “otro” Colegio Nacional, anterior al que todos hemos conocido.
Comenzó a funcionar en el año 1935 en calle Mateo Beres 275, con salida también por Av. Belgrano. El edificio era una larga galería con cuatro habitaciones que hacían de aulas.
Su director fue el Maestro Rodolfo Ruarte, con experiencia en el cargo al frente del colegio Manuel Solares.
Profesores: las hermanas Blanco (matemática y ciencias sociales), el propio Ruarte en Geografía y Castellano. La Srta. Martínez Vivot en idioma, por nombrar a algunos.
Entre los primeros alumnos pueden nombrarse a José María Ruarte Molina, Rodolfo Ruarte (h), Roberto Mazzucco, Clara Peña, Carlos Vanet, Graciela Muñoz, Benito Hernández, Nani Genari, entre otros.
Pero... el sueño terminó pronto.
Dos años después de iniciadas sus actividades, en noviembre de 1937 vino a visitar la escuela el Ministro de Educación de la Nación.
¿Qué sucedió?. Se encontró con que la escuela era mixta y se escandalizó. Tanto que ordenó que inmediatamente se cerrara, dejando sin secundaria a Alta Gracia.
Increíble, pero real en aquellos tiempos.
El sacerdote salesiano cuyo fallecimiento sigue siendo una incógnita para la ciencia y la Iglesia.
Fue a finales de los años cincuenta, tal vez con los sesenta amaneciendo. El escenario, el histórico barrio Norte y los protagonistas dos novios y toda su comitiva de familiares y amigos.
"Una sequía impresionante" es un capítulo de los tantos que tiene el libro "Viejas estampas de Alta Gracia", escrito por Jorge Zemborain, y queremos compartirlo con ustedes.
Genaro Caliendo Galasso fue un educador con todas las letras. Pero también tuvo una faceta artística que develamos en esta nota.
El recuerdo de un sismo único que tuvo a los alrededores de Alta Gracia como epicentro, allá por 1921.
El museo Jesuítico no siempre fue museo. Lo que conocimos como Casa del Virrey Liniers apenas comenzó a ser un espacio destinado al público, durante muchos años fue residencia privada de una reconocida familia de Alta Gracia.
Los hermanos Funes forman parte de la galería de grandes futbolistas que ha dado nuestra ciudad. Algunos con mayor éxito que otros, unos con más fama que los demás, pero sus nombres son recordados siempre como símbolos de un fútbol local que los tuvo como estrellas.
La Bombonería y Regalería “La Cinta de Agua” fue todo un símbolo de las décadas del setenta y del ochenta en nuestra ciudad. Finos bombones, los mejores presentes... era el lugar ideal al cual concurrir si uno quería necesitaba quedar bien con alguien a través de un presente. Y detrás de este emprendimiento, una historia de vida que merece ser contada.
Oscar Ferreyra Barcia es uno de los grandes historiadores que ha tenido Alta Gracia. De su escrito “Volviendo al Pasado”, rescatamos este texto hablando de personajes de principios del Siglo XX.
El sacerdote salesiano cuyo fallecimiento sigue siendo una incógnita para la ciencia y la Iglesia.
La fecha exacta quedó en el baúl de los recuerdos de una ciudad que suele perder la memoria de vez en cuando, y que necesita de unas ayuditas para recuperarla. ¡Y en eso estamos!